SAP pone pie en el acelerador con su iniciativa de autos eléctricos
SAP AG (NYSE: SAP) anunció que aumentará en 20 por ciento la proporción de automóviles eléctricos en su flotilla corporativa. La compañía apunta a que, para 2020, uno de cada cinco de sus vehículos sea impulsado por una planta motriz eléctrica. La iniciativa fue lanzada oficialmente en la sede de SAP ubicada en Walldorf, Alemania.
Peter Rasper, Vicepresidente Ejecutivo y Director Global de Infraestructura Financiera, y Daniel Schmid, Director de Sostenibilidad de SAP, hicieron entrega de las llaves del décimo automóvil eléctrico incorporado. Se proyecta adicionar, hasta finas de año, otros 50. SAP también anunció la entrada en operación de la quincuagésima estación de recarga eléctrica para vehículos, ubicada en las instalaciones de la misma sede, y desarrolla una solución de gestión que establecerá conexiones efectivas entre los vehículos eléctricos y las estaciones de recarga, con el fin de sincronizar los requerimientos de movilidad de los empleados con las capacidades de recarga eléctrica disponibles.
En línea con las políticas implementadas en relación con el funcionamiento de las edificaciones, instalaciones y centros de datos de la compañía, SAP potenciará sus vehículos exclusivamente con recursos 100 por ciento renovables. La medida forma parte de un programa a largo plazo mediante el cual la compañía busca reducir sus emisiones de gases de invernadero hasta el punto en que, para 2020, sean equivalentes a las que habían sido registradas en 2000. Se contempla una disminución a cerca de la mitad de los volúmenes registrados en 2007.
“El año pasado, nuestra flotilla corporativa mundial, de unos 22,000 vehículos, acaparó el 24 por ciento de las emisiones. Solo podremos alcanzar nuestra meta si incorporamos una porción sustancial de automóviles movidos por energías ecológicas”, advirtió Schmid. “Nuestro sólido crecimiento empresarial permitió que, cada año, un número cada vez mayor de empleados acceda a la posibilidad de disponer de un auto corporativo. Queremos asegurarnos que la mejoría en nuestros niveles de eficiencia energética alcanzada en las diferentes áreas no se vea obnubilada por el crecimiento de nuestra flotilla, por lo que invertimos en esta iniciativa, que además se acomoda al concepto de movilidad basada en recursos que no requieren la emisión de carbono en la atmósfera”.
Para responder a la preocupación que manifiestan los conductores en relación con la autonomía de desplazamiento inherente a los autos eléctricos, SAP realizó diversas investigaciones y colaboró con el proyecto Future Fleet, emprendido por un selecto conjunto de instituciones de prestigio, entre las cuales se cuentan la firma MVV Energie AG, el Instituto Alemán de Investigaciones Ambientales Öko-institut, la Universidad de Mannheim (Alemania) y el Instituto Alemán de Investigaciones Socio-Ecológicas (ISOE). Apoyadas en pruebas de campo que involucraron 500 empleados de SAP, investigaron distintas maneras de integrar vehículos eléctricos a la flotilla automotriz de la compañía.
“Nuestro objetivo es utilizar los resultados y desarrollar soluciones comercializables para empleados y clientes. Contamos con la experiencia y los conocimientos para conjugar los diversos aspectos que se asocian a la movilidad eléctrica y crear un sistema inteligente de gestión”, señaló Rasper. “Mediante el empleo de nuestro sistema de gestión de flotillas en vigencia como base para el proyectado desarrollo, esperamos proporcionar una solución simple e integrada que permita analizar las distancias y duración de los desplazamientos, el rango de autonomía de cada automóvil y la disponibilidad de estaciones de recarga, para así programar inteligentemente los itinerarios, antes de ponerse en camino”.
Otro aspecto relevante del programa de movilidad es un sistema de incentivos que busca animar a los empleados de SAP a pasar de autos convencionales a vehículos eléctricos mediante la oferta de un subsidio para la adquisición de baterías eléctricas. Este incentivo, combinado con los beneficios tributarios que ofrece el gobierno alemán a los trabajadores que adquieren vehículos corporativos, prácticamente neutraliza las diferencias de precio entre ambos tipos de auto.